El regreso de un director de cine a su pueblo natal despierta los recuerdos de cuando era chavalín y se embebía de cine en compañía de Alfredo, el entrañable proyeccionista de títulos maravillosos que le llevaron a ponerse, ya adulto, tras la cámara. (fuente: decine21.com)
Para tener en cuenta: Muy recomendada para aquellos que amamos el cine y su mistica.
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